Frecuentemente escuchamos muchas malas interpretaciones acerca del seguro paramétrico o las soluciones de seguros basadas en índices. En este artículo, establecemos los hechos claramente acerca de los 10 mitos principales que frecuentemente surgen cuando le presentamos las soluciones de seguros paramétricos a los clientes.
Mito #1: las soluciones paramétricas son siempre más costosas que el seguro de indemnización tradicional.
Escuchamos muchos esto, y el costo o “tasa sobre el límite” es muchas veces una preocupación que surge cuando se menciona el seguro paramétrico.
La verdad es que el seguro paramétrico y el de indemnización convencional no pueden compararse. No cubren las mismas cosas, con el seguro paramétrico se cubren las brechas de protección que el seguro de indemnización no cubre debido a los deducibles, peligros excluidos, poca capacidad, o para abordar situaciones como la interrupción de negocios contingente o daños amplios del área.
Las soluciones de seguros paramétricas o indexables están basadas en la probabilidad de un evento predefinido (por ejemplo, un huracán categoría 5, un terremoto de magnitud 7) que suceda. Debido a que están desligadas de cualquier bien subyacente, la vulnerabilidad del bien no entra en la ecuación. De manera simple, si la probabilidad de que ocurra un terremoto es de 1 en 100 años, la tasa del límite será por lo menos un 1%, independientemente del interés asegurable subyacente.
Por tanto, el arte de estructurar una solución adecuada se encuentra en establecer la estructura de activación y pago sobre los niveles correctos y mantener el precio bajo control sin comprometer la cobertura necesaria. Las estructuras de pago escalonado o con múltiples activaciones son mecanismos que adaptables a los seguros paramétricos.
Es importante recordar que las soluciones de seguros paramétricas no están diseñadas para reemplazar al seguro tradicional, son más bien un complemento para las pérdidas financieras y los peligros no asegurables.
Mito #2: el seguro paramétrico es complejo y difícil de entender
En realidad lo opuesto es lo correcto. Las soluciones de seguro paramétricas o basadas en índices son muy simples y más transparentes que el seguro tradicional: si ocurre un evento definido o el límite del índice es cumplido, la póliza se activa y el pago pre-acordado es realizado en los próximos días luego de la ocurrencia.
Algunas de las complejidades percibidas pueden venir de procesos de estructuración, lo cual frecuentemente implica varias interacciones pero es importante para reducir la base del riesgo y adaptar las soluciones para que cumplan con las necesidades específicas de un cliente. Con el seguro paramétrico no existe la letra pequeña.
Debido a que la vulnerabilidad del bien no entra en la ecuación, la suscripción y el proceso de pago de las reclamaciones es mucho más simple que en el seguro tradicional: no se necesita un estudio del lugar o una evaluación de disminución del riesgo ni procesos tediosos de ajuste de la pérdida.
Mito #3: el seguro paramétrico sustituye las soluciones de seguros tradicionales
De hecho, las soluciones de seguro paramétrico o basadas en índices están específicamente diseñadas para complementar, no para reemplazar, los programas de seguro tradicionales. Generalmente los vemos implementados para cubrir brechas de protección actuales o exclusiones de un programa tradicional.
Debido a su naturaleza fundamental, las soluciones basadas en índices son un instrumento ideal para cubrir las pérdidas financieras que impactan las empresas sin provocar daños físicos a sus bienes, por ejemplo pérdida de atracción debido a la llegada de un tifón, interrupción de la cadena de provisión debido a inundaciones en las instalaciones de las terceras partes, etc.
Mito #4: una solución paramétrica no es un contrato de seguro y puede provocar complejidades contables
En términos generales las soluciones paramétricas pueden ejecutarse como un contrato de seguro o como un derivado, dependiendo de la preferencia y necesidades del cliente. Siempre depende de las leyes y estructura legal de un país, pero generalmente la diferencia principal es que un contrato de seguro requiere de un “interés asegurable” y de una “prueba de pérdida.” Si es ejecutado como un contrato de seguro, la póliza sigue las mismas reglas y principios contables que cualquier otro contrato de seguro.
De manera simple, se podría diferenciar entre:
- La cobertura paramétrica pura, que ofrece un pago de una suma específica según la ocurrencia de cierto evento, independientemente de cualquier pérdida económica experimentada por el cliente. Generalmente se contratan como derivados.
- La cobertura “híbrida” cubre donde ambas condiciones, paramétricos y de indemnización (prueba de pérdida), deben cumplirse para que la póliza active un pago. Dichas coberturas son estructuradas como contratos de seguro.
Mito #5: el seguro paramétrico es como una apuesta
Esta mala interpretación es algo relacionado al Mito #4. La diferencia fundamental entre el seguro y la apuesta es la existencia de una exposición y por tanto de un interés asegurable.
A menos que una solución paramétrica sea ejecutada como un derivado podría técnicamente provocar una base positiva de riesgo (por ejemplo, pago sin una pérdida financiera real experimentada), la mayoría de las soluciones de transferencia de riesgo en el mundo corporativo son suscritas como contratos de seguro que requiere una prueba de pérdida.
En cualquier caso, buscamos soluciones paramétricas como instrumentos de transferencia de riesgos y dudo que cualquier gestos de riesgo tenga interés en pagar prima por una “apuesta corporativa.”
Mito #6: las soluciones paramétricas son solo apropiadas para empresas grandes
Las soluciones de seguro basadas en índices existen de diferentes tamaños y formas. Por un lado, existen soluciones altamente personalizadas y hechas a la medida que son estructuradas por necesidades específicas de una empresa generalmente grande, pero por el otro lado son soluciones altamente estandarizadas que son vendidas por internet solo a través de algunos clicks del ratón.
Es especial, las soluciones más estandarizadas como “Cat-in-a-box” (gato encerrado) o el producto de SwissRe “Insur8” son específicamente creadas para mercados de pequeñas y medianas empresas (SME) y estandarizadas para ser un instrumento eficiente también para límites más pequeños.
Mito #7: los productos paramétricos están limitados a cubrir exposición de propiedades
Realmente lo opuesto es la verdad.
Las soluciones de seguro paramétricas no cubren un bien o propiedad física específica, pero son activadas únicamente por la ocurrencia de un evento previamente definido.
En ese caso, son más útiles para proteger contra pérdidas financieras que no son provocadas por daños a físicos a un bien, o donde el bien subyacente no se encuentra bajo control de los asegurados.
Los ejemplos de soluciones paramétricas de seguros incluyen retrasos de trenes y aviones, pérdida de atracción debido a una neblina transfronteriza o inclemencias del clima que provoquen retrasos de proyectos.
Mito #8: puedes utilizar soluciones paramétricas para cubrir todos los riesgos que no son asegurables
Las soluciones paramétricas pueden ciertamente ampliar los límites de asegurabilidad, pero no son la solución de cada riesgo. El requisito fundamental siempre es tener un activador que es fortuito, que puede ser moldeado y se relaciona con la exposición financiera del asegurado.
Como tal, ciertamente pueden complementar los programas de seguro tradicional y cubrir algunas brechas que no son cubiertas por los programas convencionales, pero habrá riesgos residuales que la industrial del seguro no está interesada en afrontar.
Por ejemplo, los riesgos comerciales puros, como las exposiciones relacionadas al rendimiento o el riesgo de desarrollo de productos, seguirán siendo difíciles de transferir a una aseguradora y permanecerán en manos de los accionistas.
Mito #9: las soluciones paramétricas solo aplican para los eventos naturales catatróficos
A pesar de que los eventos naturales catastróficos son un activador muy común de las soluciones paramétricas de seguro, existen docenas de otros activadores y aplicaciones para coberturas basadas en índices.
Cuando índice tiene un elemento fortuito o volatil que puede teóricamente servir como activador. Los eventos naturales catastróficos, y el clima en general, son solo activadores prominentes porque pueden definitivamente cumplir el requirimiento fortuito y generalmente impactan el desarrollo financiero de las empresas.
Además de los activadores más comunes del clima como la temperatura, la irradiación, la velocidad del viento y las lluvias, hemos estructurado coberturas que incluyen otras cosas, activadores no relacionados al clima como decisiones regulatorias, pérdida de la atracción, pandemias o riesgo de interrupción de plantas de energía.
Mito #10: el seguro paramétrico siempre tiene un riesgo base elevado
A pesar de que el riesgo base generalmente se encuentra asociado al seguro paramétrico, el riesgo base existe en todas las estructuras de seguro. En el seguro de indemnización tradicional, el riesgo toma la forma del deducible, los sublímites o las exclusiones de la póliza, lo cual puede producir un malentendido entre las expectativas de cobertura del asegurado y el pago de indemnización real realizado bajo el contrato. Con las soluciones paramétricas, el riesgo base surge de la correlación del índice con el riesgo. Puesto de manera simple, es la diferencia entre la pérdida asegurada y la recuperación del seguro paramétrico.
Es un elemento inherente de las soluciones paramétricas o basadas en índices, y aunque la base del riesgo puede ser limitada o disminuida, nunca puede ser eliminada completamente.
El arte de estructurar soluciones de seguro se encuentra en reducir el riesgo base y asegurar cualquier pago predecible correspondiente a lo más cercano posible a la pérdida experimentada. Esto es generalmente logrado mejorando el índice y optimizando la estructura de pago.
Fuente: https://corporatesolutions.swissre.com/insights/knowledge/10_myths_about_parametric_insurance.html
