Por Heidi Johnson | 3 de diciembre de 2024
El impacto devastador de los huracanes Helene y Milton ha destacado una crisis crítica: la vulnerabilidad en aumento de los Estados Unidos a los desastres naturales y la tensión financiera que provoca en los hogares. Solo el huracán Helene provocó un estimado de $250 billones en daños, la mayoría no asegurado. Con los eventos del clima extremo en aumento, una gran cantidad de norteamericanos enfrenta un aumento del riesgo financiero. Entre los años 2018 y 2023, un 78% de los residentes de los Estados Unidos reportó haber sido directamente afectado por el clima extremo frecuentemente con consecuencias financieras graves que incluyen la disminución de la puntuación crediticia y el aumento de la deuda en los cobros.
A pesar de esto, muchos hogares permanecen sin asegurar. El costo, la complejidad y la confusión sobre las pólizas impiden que las personas aseguren con una cobertura adecuada dejándolos financieramente expuestos. La ciencia del comportamiento, que explora la manera en que las personas toman decisiones y los factores que forman esas decisiones, ofrece conocimientos prácticos que pueden ayudar a las aseguradoras a cubrir esta brecha. Según la guía de diseño de comportamiento de seguros de Financial Health Network (Red de Salud Financiera), las aseguradoras pueden adoptar practicas innovadoras para ayudar a la estabilidad financiera de las personas y comunidades en el panorama volátil de hoy.
Entendiendo las barreras de la cobertura
Aproximadamente un 3% de los hogares de los Estados Unidos carece de cualquier forma de seguro, automóvil, vivienda, alquiler, salud o vida. Además, los residentes de estados propensos al desastre están frecuentemente entre los menos probables en tener un seguro de vivienda. La ciencia del comportamiento ofrece conocimientos prácticos acerca de porqué esta brecha permanece.
Por ejemplo, la heurística de la disponibilidad, un atajo mental mediante el cual las personas evalúan el riesgo según experiencias recientes, puede determinar la manera en que ven su necesidad de seguro. Luego de un desastre las personas pueden percibir un mayor riesgo de eventos similares pero sin un recordatorio reciente entonces desaparece la urgencia. Por otro lado, el efecto avestruz sugiere que las personas puede que no busquen cobertura simplemente porque no desean enfrentarse a informaciones incómodas.
Además, el curso del status quo o la tendencia a evitar el cambio impide que muchas personas cambien a mejores opciones de seguro aún cuando se encuentren disponibles.
Las percepciones de los costos del seguro también puede detener a muchas personas. Más de la mitad de los asegurados que cancelaron su cobertura mencionaron las altas primas como un factor. Aquí, la aversión a la pérdida, la preferencia de las personas para evitar las pérdidas contra la búsqueda de beneficios, les quita la motivación para pagar una póliza a la cual puede que nunca le reclamen. Además, la fricción en el acceso de cobertura, como la complejidad de la póliza y las opciones incómodas, muchas veces impide que los clientes completen el proceso. Las aseguradoras pueden motivar una mayor adopción abordando estratégicamente estas barreras de comportamiento.
Enfoques innovadores para motivar la participación
Para vencer estos comportamientos naturales y cubrir la brecha de seguro, las aseguradoras están desarrollando estrategias innovadoras para hacer que la cobertura sea más accesible y así motivar a la preparación financiera proactiva.
- Modelos de prima alternativos
Además de disminuir las primas, las asegurdoras están experimentando con modelos de prima flexibles para conquistar más clientes. Por ejemplo, el seguro de pago por consumo Hugo permite que los clientes compren cobertura en modalidades de tres, siete, 14, o 30 días, convirtiendo el seguro en algo más accesible para los clientes con diferentes ingresos. Ladder, un proveedor de seguros de vida, ofrece cobertura ajustable permitiendo que los asegurados aumenten o reduzcan su protección según sus cambios de vida, como comprar una vivienda. Estas opciones flexibles alivian las preocupaciones de compromiso que muchas veces mantienen a las personas sin seguro.
- Construir la confianza del cliente
Cuatro de cada 10 personas no confían en que sus pólizas de seguro los cubrirá durante una emergencia, mientras que un 30% piensa que las compañías de seguro no están interesadas en servirles. Para combatir esta desconfianza, el programa “devolución” de Lemonade dona las primas no reclamadas a causas escogidas por los asegurados. Dichos programas no solo alinean los intereses de aquellos con los clientes sino que también promueven la lealtad y la confianza, factores importantes para la promoción de la resiliencia financiera.
- Simplificando la adopción
Escoger la sobrecarga y la fricción a partir de la búsqueda de pólizas puede ser un obstáculo para las personas obtener cobertura. Por ejemplo, la asociación de Root Insurance con Carvana simplifica el proceso de búsqueda de seguro al permitir que los clientes apliquen para el seguro de automóvil mientras compran un automóvil usado. Igualmente, el plan piloto de AXA con Western Union ofrece seguro de vida y discapacidad junto a otras coberturas, alcanzando las comunidades marginadas. Estas asociaciones simplifican el camino hacia la cobertura al integrar el seguro con servicios existentes.
- Utilizar mensajes motivadores
El mercado puede jugar un papel importante en la motivación de las personas a considerar la cobertura. Casi uno de cada cinco personas no aseguradas evitan el seguro de vida porque no desean pensar en la muerte. La campaña de MassMutual “Verdades Incómodas” aborda esto utilizando un tono alcanzable para llamar la atención hacia temas difíciles. Al abordar la incomodidad directamente, las aseguradoras pueden motivar a las personas a tomar acciones protectoras.
- Ayudar a los clientes a escoger sus pólizas
La incertidumbre acerca de las necesidades de cobertura se encuentra entre las principales razones por las cuales las personas evitan comprar un seguro de vida. Las herramientas que guían a los consumidores hacia planes adecuados puede ayudar a abordar este asunto. Por ejemplo, el mercado de los seguros de salud de Washington D. C., DC Health Link, ofrece una calculadora inteligente para ayudar a los usuarios a estimar los costos y beneficios haciendo más fácil para ellos escoger un plan apropiado. Herramientas simples pero efectivas como esta promueven la toma de decisiones confiable y ayuda a los clientes a encontrar la mejor cobertura para sus necesidades.
Un camino hacia una mayor resiliencia financiera
A medida que continua el aumento de los eventos del clima, las soluciones accesibles de seguro resiliente son más importantes que nunca. Al aplicar conocimientos de comportamiento, las aseguradoras pueden diseñar productos enfocados en los clientes dirigidos hacia necesidades reales que promuevan la estabilidad financiera y construyan la lealtad. Cuando los clientes se sienten apoyados por sus instituciones financieras la satisfacción se triplica junto a la probabilidad de referencias y compra adicional de productos.
Para las aseguradoras, aprovechar los conocimientos sobre el comportamiento no solo es beneficioso sino esencial para permanecer relevantes en un terreno que cambia rápidamente. Al innovar y simplificar el seguro, las compañías puede empoderar a los clientes, ayudar a cerrar la brecha de seguros y construir una sociedad más resiliente preparada para cualquier tormenta que suceda.
Fuente: https://www.dig-in.com/opinion/identifying-barriers-to-insurance-coverage
